miércoles, 3 de octubre de 2007

Conciertos

En la semana me acabo de enterar de una buena noticia que viene de la mano con un rumor que anda suelto desde la semana pasada y que psss me pone medio loquito.

Para empezar han confirmado a Iggy Pop como uno de los dos artistas principales del Corona Music Fest de diciembre en el Estadio Azteca, y aunque no sea gran fan de Iggy Pop pero es alguien que hay que ver, al menos eso es lo que se dice.

Ahora, viene la otra parte de esta misma nota, parece que el otro artista estelar será Arcade Fire, una bandota canadiense, la acabo de descubrir este año y traen un rollo que me late harto, y que me gustaría mucho ver en vivo, he leído que su show es poderoso.

El siguiente asunto viene porque se rumoró que Smashing Pumpkins sería la banda estelar del mencionado festival, pero eso se descarto porque ellos en sus sitios oficiales tienen programado Brasil en esos días, pero ¡si señor! se rumora que vienen a México el 15 de diciembre… ahhhhh…. Aaahhhhh….. sin palabras. Los pude ver en 1998 y no tengo palabras para describir todo lo que viví, no puedo ser objetivo porque soy gran fan de la banda y de Billy Corgan… a grados pueriles eh! Así que no puedo hacer más que prender una veladora para esperar que se confirme el rumor.

Hablando de conciertos, hace unos días y al ver la cantidad de eventos que hay para este cierre de año me entro la nostalgia y recordé como de hace 15 años para atrás no había prácticamente conciertos en México, seguramente quienes, como yo, tienen más de 30 años deben recordar que hablar de “ver a tu artista favorito en vivo” era como una fantasía húmeda de los fans, y cuando llegaron los primeros conciertos no importa de quién fuera había que ir, recuerdo las transmisiones especiales de W FM cuando Rod Stewart vino a Querétaro, los portazos de los primeros conciertos y me cuesta trabajo pensar en cómo explicarle a alguien menor de 20 años como en aquellos ayeres simplemente no había artistas internacionales (decentes) que se presentaran aquí, así de simple y de bobo, no había nada. Nos teníamos que conformar con escuchar los discos en vivo y chance ver un video, si es que había una videocasetera disponible. En fin, son otros tiempos y más vale disfrutarlos.

Por lo pronto el sábado me voy a ver a los Héroes del Silencio, seguramente estará lleno de “veteranos” y de rockeros atrapados en los 90… me vale, soy fan.

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